Estados Unidos permitirá la entrada cada mes de hasta 30,000 migrantes de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela, pero endurecerá las restricciones para aquellos que intenten cruzar la frontera con México sin la documentación necesaria, informó este jueves un funcionario estadounidense.
"Estas medidas ampliarán y acelerarán las vías legales para una migración ordenada y tendrán nuevas consecuencias para quienes no utilicen esas vías legales", dijo la Casa Blanca en un comunicado.
La cuota de migrantes se limitará a quienes tengan a un patrocinador estadounidense, y aquellos que intenten entrar ilegalmente serán expulsados bajo la norma sanitaria conocida como Título 42 y con la intervención de la policía, en coordinación con México.
El presidente Joe Biden tiene previsto hablar este jueves sobre este plan, que es su último intento de aliviar la presión en la frontera con México, adonde llegan en tropel un número récord de migrantes y solicitantes de asilo huyendo de la miseria en sus países de origen.
En octubre ya se lanzó un programa similar para 24,000 venezolanos, que les permitía ingresar al país mediante una petición formal, para la cual precisaban tener un patrocinador en Estados Unidos, pero esto era solo por vía aérea.